jueves, 2 de septiembre de 2010

Nota mental. Categoría "lo que me dejó la virtualidad" (o "lo que la virtualidad se llevó")*

Uno de los (pocos) pros de la herramienta Facebook es la información de estado civil: es mucho más fácil que sea el caralibro el encargado de decir Mandarina Rabiosa "tiene una relación"**, que tener una que explicarle a un muchacho que no te atrae, pero que lo encontrás recopado y que te cae bien (un perfil fan, digamos). La traducción a relacionamiento-virtual básico es: soy tan pelotuda que no se cómo decirte que no da para concretar nada, así que me invento un señor imaginario (con el que, por su misma entidad imaginaria, tampoco concretaré, claro está).


*Para qué buscar un motivo intelectual, si es la sed -necesidad fisiológica- la que nos hace ver el vaso medio lleno o medio vacío, nos hace decir: ¡medio vaso para escabiar! o la puta, sólo medio vaso para escabiar.
**ah sí, veo la paja en el ojo ajeno*** , pero al mismo tiempo me hago cargo, lo que me vendría encontrando en un estadío de gataflorismo reflexivo.

***o el ojo en la paja ajena, que para el caso sería lo mismo, pero tiene un toque más Café-Fashion.

martes, 24 de agosto de 2010

El medicamento es peor que la dolencia*

Sigo sin hacer mía la autoadjetivación de grasa**; en cambio, te puedo aceptar una "bestiabruta"con total tranquilidad. Porque...
Si tengo que sacar una mancha, te hago batik la ropa, a fuerza de lavandina pura; si decido volver a depilarme, me ensaño hasta con el vello más bello, y te etcetero, et cetera; te exagero hasta la exageración y me como la redundancia.
Podré decir -a mi favor- que es porque al quemarme con un lácteo, veo al vacuno y sollozo***, pero no quisiera engancharme en la excusa fácil, porque siempre es posible complejizarla más, y a mi neurosis (Martha, te la presento, un divinor) más le place de este modo.
Resulta que el idilio virtual dura lo que la promoción de conexión a precio razonable y bastará con recibir sms' cada vez más espaciados para saber que otra princesa virtual ocupa mi lugar (¿y quién hará mi trabajo debajo de tu teclado?). Y a la sazón me ilumino y veo que la chancha y los veinte también eran el pan y la torta**** y en retrospectiva el noviazgo virtual tenía una gran contra: por más realidad simulada y efecto 3D, no hay quien te toque una teta.
Y entonces, me paso al otro extremo***** y exijo pruebas de tangibilidad: "yo te doy mi teléfono si me vas a llamar; de otro modo, no perdamos más tiempo, que dejé a mi amiga hablando con un moplo y tengo que rescatarla" fue una frase que -ajena a todo juego de seducción- pronuncié hace no mucho. También le he recordado a un señor -en descarado apriete- que, pese a gustarme su conversación, no me estaba invitando concretamente a nada; e incluso he evaluado distancias -hablo de más allá del primer cordón del conurbano, eh- y posibilidades reales de volver a ver a un muchacho antes de negarle mi teléfono.
En fin, la cuestión es que, alejada de la poesía, el pragmatismo y la más descarnada literalidad son mi credo de hoy. Intentaré tomarlo como base de estudio científico para las futuras generaciones (?)****** mientras les advierto, niñas: no practiquen esto sin la supervisión de una amiga responsable, a menos que deseen experimentar el sentirse tan batracio de otro agujero como una servidora.

*es una variación muy pedorra del dicho pop ular que utilizaré de canchera que soy nomás.
**mersa me gusta más, porque tiene el plus de ser pacolmo, vintage (o demodé, como prefiraís) :P.
***y soy como el cuento de la mujer del pediculósico, que aún bajo el agua sigue haciendo gestos.
****me preocupo: dos personas, en menos de una semana me preguntan si estoy segura de no ser torta (?). Y yo que tengo la duda fácil le dedico una sesión de psicóloga a las dudas ajenas, la conchisumá.
*****pero mal: paso del negro al blanco sin mediar ni un gris arratonado.
******digo, para sacarle algún provecho a semejante demostración de impresentabilidad social.

jueves, 5 de agosto de 2010

El mundo es un buñuelo


El mundo es un pañuelo, y unas ilustraciones que te copan que cuelga alguien en feisbuc son de ése que te mostró su cuadernito de dibujos en una fiesta, ése que te dejó su tarjeta con la dirección del blog que nunca visitaste, ése que volvía una y otra vez a hablarte. Ése, que fue excusa de aquel otro que no necesitaba excusas, para dibujar una razón de irse. Ése.

El mundo es un señuelo, y la mosquimuertez crece a diestra y siniestra, y se vuelve siniestra. Y quienes dijeron negro, te juzgaron de punta en blanco, y tiraron la piedra y escondieron la mano, y todo el resto, escondieron. ¡Soy tu víctima! gritan, y confían en que vos no digas. Y quienes te pagan un sueldo se creen que pagan tu vida, y no dicen la verdad en la puta vida, y confían en que vos no digas. Ésa y ése.

El mundo no tiene consuelo, ni atracadero. Felizmente, lo que tiene de triste también lo tiene de verdadero, y no va a ser peor porque no hay cosa posible. Ésa.

Lo comí esta tarde. De indigesto bocado conservo el gesto.

viernes, 16 de julio de 2010

Chatéame y no me toques, pero chatéame (o "Ay, doña")

Ay doña, no me diga que nunca tuvo una relación "virtual".
Yo sí: "hola, soy Manda, y estoy aquí porque he tenido una relación virtual"*.
Por lo general, no me causan gracia estas cuestiones: lamento decirlo; soy la dinosauria que no entiende esto de no verse, no tocarse, no reír cara a cara con el otro, no compartir una cerveza, en fin: estoy a favor del disfrute del contacto humano. Por esto mismo más de una vez me he sentido usada cuando algún galán (?) se quedaba en el contacto virtual y se conformaba con mandarme mensajes de texto, o hablar hasta las 3 de la mañana por chat, sin concretar un encuentro. Aún así, he caído en las garras de la virtualidad, que también tiene sus beneficios.
Primeramente, no hay que taparse los ojos: es una forma de relacionarse que, lejos de encontrarse en retroceso, es cada vez más popular, así que hay que apechugar (?). Seguramente algo tiene que ver que cada vez haya más canales para comunicarse: facebook y twitter a la cabeza, además del consabido msn o del skype. Sin embargo, a mi entender, la diversificación de canal sólo redunda en la mediatización de la relación o, redondamente*** en la sustitución del encuentro personal por la comunicación virtual.
Es allí donde encuadro el hecho de haber recibido por más de 2 meses sms' de JohanSebastian****, un muchacho muy simpático, que me pidió el teléfono mas no una cita. El tenor de los mensajes iba del clásico "¿en qué andás?"*****, pasando por detalles de su rutina diaria como "voy al ensayo ahora, porque mañana presentamos una obra" e incluso unos más romántico-existenciales como "la luna nos enseña" (wtffffffff?). Viendo que venía en la misma onda, bloqueé a un pseudofan que me hablaba por chat, hasta que no pudo más con su genio (?) y comenzó a mandar mails para vernos. Algo similar ocurrió con un chico con el que me veía esporádicamente, que me expresó su indignación ante el bloqueo de msn, sin más razones que "no es de adulta bloquear" y admitiendo que su único interés era charlar (ni coger, ni tampoco ser amigos******). En fin, soy de las que prefieren ser "menos polaroid y más almohada".
Hasta aquí, nada que quiera repetir. Sin embargo, recientemente me he cruzado con una nueva modalidad de la virtualidad, que tal vez me guste: el noviazgo virtual. Mensajes de buenos días, "besos por celular", archivos compartidos... y el temor-certeza de que los encuentros reales no estén-han estado a la altura de las circunstancias. Ay, doña, qué fácil era todo cuando no estábamos tan traumis, y aspirábamos a la chancha y los veinte*******.

*A no preocuparse, que este es un grupo de ayuda totalmente anónimo.
**No se por qué se olvidarán que soy un espíritu libre.
***¿Redundamente?
****No, no se parecía al de Skid Row afortunadamente. Ni tampoco -calculo- al compositor clásico.
*****El "en qué andás?" es un mensaje que amerita un análisis más profundo, que no estoy con ganas de hacer; irá a "notas mentales", lugar en el que seguramente se perderá sin retorno.
******¿y qué querés, roberto, entonces? ¿correción de textos gratarola?
******O al chateo, los mensajes y las cenas y el sexo.

martes, 6 de julio de 2010

La pesadilla de la

que ansía llegar a casa
estando en ella.
Que presiente
que todo se resolverá
en los brazos de mamá.
Y descubre con violencia
que mamá, es ella
y no hay autoconsuelo
para la pesadilla de la




(ah, para hacer las delicias freudianas)